El arte del bonsái nació en la china. Sin embargo, en Japón
es su patria indiscutida, pues fueron los japoneses quienes llevaron las
técnicas de cultivo hasta el nivel cercano a la perfección, crearon la
terminología adecuad, establecieron los estilos básicos y finalmente lo
difundieron por el mundo.
Según el génesis, la historia de la humanidad se inicia con
el árbol del bien y del mal. Comer sus frutos estaba prohibido pues permitía
conocer sus secretos. Pero la tentación pudo más que la voluntad y Adán y Eva
fueron echados del paraíso. Probablemente, esta sea la causa por la cual muchas
civilizaciones primitivas consideraron a los árboles como fuente de sabiduría.
Durante la Edad Media el árbol fue el encuentro, el lugar en
el que se realizaban las asambleas, se administraba la justicia y el pueblo
celebraba sus fiestas.
Bonsái: taoísmo al padecer el arte, del bonsái tuvo un
origen religioso, la lucha del hombre contra los males que amenazaban su existencia, sobre todo porque él mismo
quebraba la armonía de la naturaleza, la cohesión entre los principios del yin
y yang, para el pueblo chino el hombre y la naturaleza formaban una unidad de
armoniosa.
Conforme con esta concepción nació la idea de expresar lo
grande a través de lo pequeño, cada miniatura, árbol o paisaje representaba una
concentración de fuerzas mágicas
protectoras, verdaderos talismanes. A lo largo de los siglos, este fue el
objetivo de la mayoría de las disciplinas artísticas..
Los potus como planta de interior gustan mucho y decoran los ambientes.
ResponderEliminargracias por tu comentario,,,si los pothus quedan bien en los interiores...
EliminarMe gustan los bonsair y mucho...gracias por esta bella página.
ResponderEliminarLos muros decorados quedan muy bellos y dan elegancia a algunos lugares algo oscuros.
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